3cdasflores secas de camomilao 3 bolsitas de infusión de camomila
240gazúcar
2cditaslevadura químicao polvos de hornear
½cditasal
½cditabicarbonato
1limón(la ralladura)
2cdaszumo de limón
35gmaizenao fécula de maíz
25gaceite de cocoo de oliva suave
3cdassemillas de amapola
Para acompañar (opcional)
200mlnata para montarvegana (de coco) muy fría
Azúcar glas al gusto
1cditaframbuesa en pasta
Elaboración paso a paso
En primer lugar añadimos las flores secas de camomila o las bolsitas de infusión en el agua caliente unos 5 minutos. La colamos por si han quedado residuos y la dejamos templar.
En un bol mezclaremos el azúcar y la ralladura de limón.
Añadimos las harinas, la sal, la levadura, el bicarbonato, el zumo de limón, el aceite de coco y el agua (que ya estará fría). Mezclamos bien y repartimos la masa en los moldes bien engrasados.
Ahora, y con la ayuda de una cuchara, espolvoreamos semillas de amapola sobre los bizcochos, de modo que nos quede una base crujiente de semillas, tal y como puedes ver en las fotos.
Precalentamos el horno a 180ºC y horneamos unos 25 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo nos salga limpio.
Para la nata a la frambuesa: con la ayuda de unas varillas eléctricas empezamos a montar la nata. Cuando esté medio montada, añadimos azúcar glas al gusto (yo le puse 1 cucharada y media) y acabamos de montar.
Finalmente añadimos la cucharadita de frambuesa en pasta y la mezclamos bien con una espátula. Es muy importante no sobrebatir la nata al montarla, ya que si nos pasamos batiendo se puede cortar.
Una vez tengamos los bizcochitos fríos los coronamos con la nata de frambuesa y listos para servir.