En primer lugar cocinamos la pechuga de pollo. Puedes hacerla a la plancha, al vapor, cocida o asada, según más te guste. Incluso puedes aprovechar los restos de pollo que te hayan quedado del día anterior. La desmenuzamos o cortamos en trozos pequeños.
Limpiamos los pimientos y los cortamos en dados pequeños. Pelamos la cebolla y la cortamos en juliana.
Calentamos una sartén con un chorrito de aceite de oliva y agregamos las verduras. Las pochamos durante unos minutos y salpimentamos al gusto.
Cuando las verduras estén tiernas agregamos el pollo desmenuzado, mezclamos bien y añadimos un par de cucharadas de salsa de tomate. La cantidad de salsa va al gusto de cada una, pero no debemos poner demasiada, ya que nos quedaría un relleno muy líquido.
Cocinamos todo junto un par de minutos y corregimos de sal y pimienta si fuera necesario. Apagamos el fuego y dejamos que se atempere antes de preparar las empanadillas.
Con la ayuda de un cuchillo, quitamos la corteza al pan de molde y lo estiramos bien con un rodillo, para que nos quede una lámina de pan bien fina.
Colocamos una porción de relleno sobre el pan de molde. Es importante no poner demasiado relleno, ya que nos sería imposible cerrar bien la empanadilla.
Para cerrarla, la doblamos sobre sí misma y sellamos bien los bordes con un tenedor, de este modo no se nos escapará el relleno. Repetimos con todas las empanadillas.
Con una brocha de cocina, pintamos las empanadillas de pollo con huevo batido.
Introducimos en el horno precalentado a 180ºC y dejamos unos 10-15 minutos o hasta que se hayan dorado y estén bien crujientes.
Al pulsar el botón "Play" se cargarán las cookies de Youtube. Si deseas cargarlo sin cookies pulsa aquí
Notas
Siguiendo esta misma técnica, podrás usar cualquier tipo de relleno que te guste.