Dorar el pollo en una cazuela con un chorrito de aceite de oliva, dándole la vuelta de vez en cuando, unos 8 minutos.
Picar la cebolla y los dientes de ajo.
En la misma cazuela donde hemos dorado el pollo, pochar la cebolla y los ajos con un poco de aceite. Retirar y reservar.
Aprovechamos el aceite que ha quedado para dorar las almendras un par de minutos. Debemos ir dándoles la vuelta, ya que se queman muy fácilmente y eso aportaría un desagradable sabor amargo al plato.
Retirar las almendras y tostar las rebanadas de pan por ambos lados.
En el vaso de la batidora agregar la cebolla pochada, las almendras tostadas, la salsa de tomate, el pan tostado y el vino blanco. Triturar hasta conseguir una salsa homogénea.
Colocar la salsa resultante en la cazuela junto con el caldo de pollo y la hoja de laurel y llevar a ebullición durante 2 minutos para reducir el alcohol.
Salpimentar al gusto y agregar el pollo. Cocinar a fuego suave unos 30-35 minutos.
Notas
Podemos substituir la salsa de tomate por 1 tomate maduro rallado.Esta es una receta que podemos congelar sin ningún problema. Para hacerlo esperaremos a que esté frío, lo meteremos en un recipiente hermético o en una bolsa de congelación y lo meteremos en el congelador.Para descongelarlo, lo sacaremos un día antes de consumirlo del congelador y lo dejaremos en la nevera para que se vaya descongelando poco a poco. Antes de servirlo podremos calentarlo durante un par de minutos en el microondas.Si preparas esta receta con antelación, podrás calentarla en el microondas o bien en un cazo a fuego medio.